Ah, verano… Trae tan buenos recuerdos de la infancia. Como deslizarse por un tobogán y después caer a la piscina, en tu parque acuático preferido. O nadar al aire libre. O pasar todo el día construyendo un fuerte de arena en la playa. Y una luna llena significaba aún más la oportunidad de estar afuera en esas noches de verano, cuando el sol se ponía tarde. Sí, esos eran los viejos tiempos.
Desafortunadamente, los recuerdos actuales del verano para la mayoría de los niños de hoy serán a través de un espejo muy diferente. Ya sea el vidrio de la ventana del asiento trasero de un coche, ya que son llevados a un evento durante su llamado «tiempo libre». O a través de la ventana de de su casa o apartamento porque sus padres temen que sea demasiado peligroso jugar cuando oscurece afuera. O si está mirando una pantalla de cristal mientras juega videojuegos o mira televisión. La mayoría de los niños en la sociedad actual, no están «experimentando» las mismas alegrías del verano que muchos de nosotros, ahora padres, y que recordamos.
La nostalgia no es la única víctima en este cambio de estilo de vida. Según estudios actuales, solo el 7% de los niños y jóvenes cumplen con las pautas de 60 minutos de actividad moderada a vigorosa cada día. ¡Los niños ahora pasan cerca de ocho horas por día frente a una pantalla! No es de extrañar que la única exposición de los pequeños a los deportes de verano, sea a través del último videojuego .
Los padres y las familias juegan un papel vital a la hora de ayudar a revertir estas tendencias. Proporcionar un entorno hogareño que respalde estilos de vida saludables y activos es la base para futuros resultados de salud positivos. Desafortunadamente, también los últimos informes sobre actividad infantil dice que un porcentaje bajo de padres jugaron juegos activos con sus hijos.
Jugar con tu hijo puede ser una de las cosas más gratificantes que puedes hacer tanto para ti como para tu niño. No solo hay grandes beneficios para la salud física y mental para usted y su pequeño, sino que el tiempo dedicado a la vinculación y el hecho de ser un ejemplo pueden ayudarlo a desarrollarse de una manera divertida y significativa. Bien, volvamos a nuestro dilema de las maravillas del verano. Ser padres en el verano es un trabajo duro. Cuando ayuda a ponerse los bañadores y las cremas solares, los manguitos para natación, algún juguete inflable etc. etc…., usted siente que acaba de completar su propio entrenamiento personal del día. Pero, con un poco más de esfuerzo, puede ayudar a su hijo a crear recuerdos de verano positivos, y también ayudar a su hijo a desarrollar una actitud positiva hacia un estilo de vida saludable.
Hazlo simple y divertido… Comience con las cosas que ya le gusta hacer juntos en otras épocas del año. Si te gusta jugar al fútbol, intenta jugar en la playa en el jardín o patio trasero. Si te gusta construir castillos de arena en la playa, intenta construir uno grande y bonito que recuerdes mucho tiempo. O si le gusta ir a pasear en bicicleta en el verano, o salir a caminar juntos( y lleve consigo palos luminosos o linternas para aumentar su visibilidad). Las posibilidades son infinitas. ¡
Si bien el verano ofrece algunos desafíos únicos para ser activo, también ofrece algunas oportunidades únicas. La clave es elegir actividades físicas en las que diviertan usted y sus hijos haciendo cosas juntos. Y para esto nada mejor que el juego activo. No tiene que ser organizado ni estructurado. No tiene que costar un céntimo. Ser activo con su hijo es una de las mejores inversiones que pueden hacer ustedes como padres.
Y tal vez algún día, cuando su hijo alcance la mediana edad y reflexione sobre sus actividades de verano , recordarán con una sonrisa en la cara los viejos tiempos de la infancia cuando pasaban un día de juego activo de verano con usted. . .
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