Convierte el senderismo con tus hijos en una aventura basada en la naturaleza

En el primer cumpleaños de mi hijo mayor, ya realizamos nuestra primera caminata de senderismo toda la familia, que en aquellos tiempos éramos cuatro, mi hijo, Manuel (mi marido),  Hugo (nuestra mascota, un fox terrier precioso)  y yo.

Desde entonces practicamos actividades y deportes al aire libre periódicamente .  

Siempre me ha gustado la idea de salir  y pasear por senderos, explorar bosques y campos mientras se cuida y se admira la vida silvestre. El buen ejercicio de la caminata o senderismo, es especialmente indicado  para aquellos de con menos inclinaciones atléticas. Yo personalmente,  nunca tuve la coordinación suficiente para jugar al fútbol o lanzar un balón , ​​pero los días de mi infancia os aseguro que  eran muy activos. Mi mejor amigo y yo exploramos las marismas a lo largo del río Odiel (Huelva) durante horas o rastreábamos arroyos. Ahora, me gustan las salidas similares con mis hijos.

Parte de mi razonamiento es la pura aptitud física de todo esto. Es agradable estar al aire libre y en movimiento. También hay una pequeña parte de mí que intenta asegurarme de que estoy criando a niños  intrépidos que puede ensuciarse las manos literalmente / figurativamente.

Tenemos la suerte de vivir cerca de un terreno boscoso, y la vida natural nos visita con normalidad.

 

Nuestras reglas básicas de senderismo:

 

  1. Siempre nos ponemos protector solar y sombreros.
  2. Siempre llevamos agua.
  3. Cubrimos la mayor parte de nuestras piernas, tanto como sea posible.
  4. No recogemos flores silvestres ni las pisamos  a propósito.
  5. No molestamos a los animales.
  6. Lo más importante es que si alguno de mis hijos  se separa de mí o se pierde (en este momento, muy poco probable), tiene que quedarse junto a un árbol y gritarme,  hasta que la encuentre.

 

 

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