Qué es la vitamina K y por qué importa
La vitamina K engloba un grupo de compuestos liposolubles implicados en la coagulación sanguínea y en procesos relacionados con la mineralización ósea. Asegurar su ingesta dentro de un patrón equilibrado contribuye al correcto funcionamiento del organismo y a la prevención de carencias de micronutrientes (OMS). Las guías prácticas de la FEN recomiendan priorizar verduras de hoja verde, otras hortalizas, legumbres y alimentos de origen animal en el marco de una dieta variada.
Tipos y fuentes dietéticas
- K1 (filoquinona): predominante en verduras de hoja verde (espinacas, acelgas, kale), brócoli, coles de Bruselas.
- K2 (menaquinonas): pequeña proporción en alimentos fermentados y de origen animal como quesos y huevos.
Deficiencia: señales de alerta
- Facilidad para sangrar o aparición de hematomas ante golpes leves.
- Sangrado nasal o de encías con mayor frecuencia.
- En lactantes, la profilaxis con vitamina K al nacer es práctica habitual para prevenir la enfermedad hemorrágica.
Estas señales no son exclusivas de la deficiencia de vitamina K. Si aparecen, consulta con profesionales sanitarios.
Quiénes pueden estar en mayor riesgo
- Dietas muy bajas en verduras y alimentos frescos.
- Problemas de absorción de grasas (patologías digestivas) o tratamientos que interfieren con la vitamina K.
- Personas con tratamiento anticoagulante: requieren seguimiento profesional y ajustes dietéticos individualizados.
Cómo cubrir las necesidades
- Incluye verduras de hoja a diario (ensaladas, salteados, cremas).
- Combina con fuentes de grasa saludables (AOVE, frutos secos) para mejorar la absorción.
- Integra legumbres, huevos y lácteos según tu patrón.
Ideas prácticas de menú
- Ensalada templada de espinacas con garbanzos y vinagreta.
- Salteado de kale con ajo, huevo y pan integral.
- Crema de brócoli y puerro con topping de semillas.
Preguntas frecuentes
¿Necesito suplementos?
La base es la alimentación. La suplementación se valora caso a caso por profesionales de la salud.
¿Puedo tomar verdura de hoja si uso anticoagulantes?
En tratamientos anticoagulantes, no cambies tu ingesta de vitamina K sin consultar. Lo importante es mantenerla estable y seguir pautas médicas.
Cuidar la vitamina K es cuidar tu corazón y tus huesos. Para orientarte, apóyate en recursos como OMS y FEN.