Unas palomas, aterrorizadas por la presencia de un milano, llamaron al halcón para que las defendiera.
Inmediatamente él aceptó.
Cuando ya ellas lo habían admitido dentro de su palomar, se dieron cuenta que hacía mucho más estragos y matanzas en un día,
que lo que haría un milano en un año.
Evita los remedios que son peores que la enfermedad.