Las liebres y los leones

 

Las liebres arengaban en la asamblea y argüían que todos deberían ser iguales. Los leones entonces replicaron:

-Sus palabras, señoras liebres, son buenas, pero carecen de garras y colmillos como los que tenemos nosotros.

Acepta que todos tenemos diferentes cualidades para diferentes circunstancias.

Facebooktwitterpinterest

Deja un comentario