El lobo, la zorra y el mono

Un lobo acusó a una zorra de robo, pero la zorra, siendo en realidad inocente,  negó totalmente la acusación.

Un mono se ofreció a juzgar el asunto entre ellos.

Cuando cada uno había declarado totalmente su caso, el mono dio esta sentencia:

–No pienso que usted, señor lobo, hubiera perdido lo que reclama; y usted, señora zorra, por sus antecedentes, creo que realmente robó lo que tan fuertemente niega.»

 

Los deshonestos, con su mal prestigio, cuando actúan honradamente, no consiguen ningún crédito.

Facebooktwitterpinterest

Deja un comentario