El Sastrecillo Valiente – Cuentos de Grimm
Un buen día, un sastre estaba sentado en su banco junto a la ventana de su casa con muy buen humor, cosiendo con mucha diligencia, cuando llegó a la calle una mujer del campo, gritando: “¡Buenas mermeladas a la venta! ¡Buenas mermeladas a la venta! Este grito sonó agradable en los oídos del sastre y, sacando su pequeña cabeza por la ventana, gritó: “¡Aquí, mi buena mujer, trae tus mermeladas aquí!” La mujer subió los tres escalones hasta la casa del sastre con su gran canasta y comenzó a abrir todas las ollas juntas delante de él. Las miró todas, las sostuvo a la luz, olió y por fin dijo: … Read more