La importancia del liderazgo asertivo

Para que un líder exprese sus necesidades personales y grupales de manera efectiva, debe ser capaz de ser asertivo cuando sea necesario. La asertividad es una parte importante de la comunicación efectiva: permite a los demás no solo tener claro lo que quiere y su posición, sino que también les da la oportunidad de modificar su comportamiento o responder con sus propias necesidades e ideas.

Un buen líder sabrá cómo usar la asertividad para ganar respeto y autoridad, sin alienar a ningún miembro del grupo ni a nadie fuera del grupo. Al igual que muchas habilidades de liderazgo, la asertividad es algo que se puede aprender y mantener con la práctica regular.

asertividad

¿Asertivo contra agresivo?

La gente a veces confunde asertividad con agresividad cuando, de hecho, los dos son completamente diferentes. La asertividad no se trata de ser ruidoso, grosero, arrogante o irrespetuoso con los demás, sino que es una expresión directa y honesta de sus propios sentimientos y necesidades. A diferencia de la agresividad, no implica dañar a otra persona, ya sea física o emocionalmente, ni violar sus derechos.

Cuando eres asertivo, pretendes igualar el equilibrio de poder, en lugar de simplemente «ganar la pelea», posiblemente a través de formas negativas como humillar o lastimar a otra persona. Los líderes que practican la asertividad correctamente están más interesados ​​en negociar una nueva solución con el otro individuo, que simplemente en «yo gano / tú pierdes».

Al ser asertivos de la manera correcta, los líderes pueden expresar sus legítimas necesidades, deseos, ideas y sentimientos, y de esta manera, crear relaciones honestas con los demás y al mismo tiempo también permitir que otros respondan con sus propias necesidades, deseos, ideas y sentimientos.

Asertividad en el liderazgo

La asertividad es muy importante en el liderazgo: es una de las habilidades de liderazgo clave para lograr el éxito en el  de un grupo de personas. Los líderes que no son lo suficientemente asertivos no se defienden a sí mismos ni a sus grupos u organizaciones y, por lo tanto, se aprovechan de ellos(o de su grupo u organización).

Ser asertivo de la manera correcta tiene muchos beneficios: al defenderse a sí mismo y a su grupo y comunicar sus necesidades, ganará respeto para usted y su grupo, porque las personas respetan a aquellos que pueden expresar honestamente sus sentimientos y necesidades de manera no confrontacional.

Ser asertivo puede ayudar a que las relaciones se vuelvan más auténticas, ya que podrá compartir sus reacciones honestas con los demás y alentarlos a que hagan lo mismo con usted. Además, expresar sus sentimientos sobre el comportamiento de otras personas les proporciona un indicador preciso de su posición y les permite modificar su comportamiento.

De hecho, aunque muchas personas temen ser asertivas porque les preocupa el potencial de conflicto, no ser asertivo también puede dañar las relaciones porque terminas sacrificando tu integridad y negando sentimientos personales honestos, lo que puede provocar resentimiento y relaciones dañadas.

Comportamiento asertivo

La asertividad no solo se trata de lo que dices, sino de cómo lo dices. Hay muchas formas de comportamiento asertivo: la forma básica es simplemente defender sus creencias, opiniones o sentimientos. Sin embargo, también puede ser asertivo de una manera empática, de modo que exprese sus sentimientos y creencias pero los relacione de manera sensible con otro individuo.

Alternativamente, puede mostrar un comportamiento asertivo creciente donde comienza con algunas afirmaciones básicas, pero luego aumenta la intensidad de sus sentimientos e ideas si la otra persona no responde a sus expresiones. Finalmente, existe un comportamiento asertivo de confrontación cuando las ideas y creencias de la otra parte están directamente en conflicto con las suyas.

Los diferentes tipos de comportamiento asertivo se adaptarán a diferentes personas y diferentes individuos. Sin embargo, hay algunas pautas generales que son válidas para todas las instancias, por ejemplo, no tenga miedo de establecer límites y ser firme en su cumplimiento; no retrocedas ante la primera instancia de presión de otros. Del mismo modo, no tenga miedo de decir «No», no caiga en la trampa de la culpa, sea honesto con los demás si no puede o no quiere asumir una responsabilidad, llevar a cabo un proyecto o aceptar una opinión.

Finalmente, si tiene problemas para mostrar un comportamiento asertivo, intente «reescribir toda la escena»; en otras palabras, imagine un momento en que no fue lo suficientemente asertivo y repítalo, imaginándose lo que tendría o debería haber dicho y cuál sería la idea de respuesta asertiva. Estos juegos de roles mentales te ayudarán a ser más asertivo en una situación similar en el futuro.


Más contenido…

Facebooktwitterpinterest

Deja un comentario